domingo, 3 de enero de 2010

Regalo Navideño: Carlisle & Esme Completo

Chicas buenas noches!! perdon por la tardanza pero en verdad es muy dificil escribir sobre esta pareja, con Jake & Nessie ya llevo la mitad asi que les pido que sean pacientes y no se desesperen, les dejo este regalo de Carlisle & Esme y espero ya mañana poder entregarles el regalo completo de Jake & Nessie, para concluir con la pareja de Edward & Bella.

En cuanto a Seducción el siguiente capi lo publico el Jueves, sera el de Emmett & Rose veamos como les va a esta pareja, habra una pequeña participación de Edward, que dirá?

Bueno ahora si les dejo este regalo espero les guste y espero comprendan que es muy dificil imaginar a esta pareja ya que hasta yo los veo como mis padres. Por favor no olviden comentar, las quiero y gracias por el apoyo.

Mordiscos Dulces

P.D. Todos los personajes son creación de la Sra. Stephanie Meyer, la historia es de mi poca imaginativa mente

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REGALO NAVIDEÑO
CARLISLE & ESME


CARLISLE POV



En cuanto alcance a ver la frase que tenia el papel que estaba pegado a las escaleras, me vi peleando con Edward y Emmett para poder subir por las escaleras y aunque a Emmett y a Rosalie les gustara hacernos bromas a Esme y a mi, en cuanto a que a mi edad ya no podia cumplirle a mi esposa, la verdad era que lo hacia y muy bien, gracias.


Una risita me saco de mis pensamientos busque con la mirada y vi a Edward riéndose por lo bajo—de que te ríes Edward?—pregunte curioso.


De ti Carlisle, quien diria que cumples tan bien con Esme—dijo ya huyendo hacia su cuarto y no parando de reir.


Suspire, eso me lo gano por pensarlo, sin perder mas tiempo gire hacia nuestro cuarto y entre, busque a Esme con la mirada pero no encontre nada, el cuarto estaba vacio era como si Esme no hubiera pasado por ahí.


Esme—dije tratando de que me escuchara a lo mejor estaba haciendo otra cosa y se le fue el tiempo—Esme, cariño que… -- me quede con las palabras en mi boca no podia creer lo que mis ojos veian, me quede contemplándola con la boca abierta y con el deseo creciendo.


Esme……que…… bella te ves—dije tratando de recuperar la compostura, no podía creer lo que veía, ella estaba en mi despacho, la puerta la había dejado abierta y estaba recargada en mi escritorio, con un traje entallado negro de cuero, con zipper en el centro, medias negras a mediomuslo con una cruz roja en el centro y un sombrero negro de enfermera con unos tacones negros.


Estaba preciosa y yo ya estaba imaginando lo que haría, con esas medias y mi boca cuando empezó a caminar hacia mi.


Doctor no me siento bien, me duele aquí—dijo señalando con el dedo en el pecho y haciendo un puchero precioso—y aquí—dijo señalando sus pompis y agachándose un poco mas para ver como el vestido se le pegaba al cuerpo—y por ultimo aquí – dijo ya señalando entre las piernas—que cree que debería de tomar?.


Vi como se sentaba en el escritorio doblando la pierna y dándome un vistazo rápido de su centro, por todos los santos no traia nada, absolutamente nada, ese pensamiento me quemo como el fuego, me sentía arder, hacia tanto tiempo que no habíamos podido estar juntos y ahora sabia que cualquier movimiento me haría llegar.


Opte por seguirle el juego, en esto podemos jugar los dos si ella me quiere provocar, veremos quien se quema primero.


Claro Señorita, por favor tome asiento déjeme la osculto—dije riendo para mis adentros al ver la cara de sorpresa de Esme, después paso a ser una de confusión y sento en la silla con las manos juntas en su regazo y las piernas pegadas.


Haber digame exactamente donde le duele?—Carlisle, yo se que nosotros jamás hemos utilizado este tipo de “herramientas”, cuando estamos juntos y aunque se que de seguro me vere ridícula me gustaría saber que opinas, me lo puedo quitar ahora mismo, sino te plaze.


Así que por eso su cara y su forma de sentarse, tenia miedo que no me gustara su sorpresa, su vestimenta, era algo estúpido la amaba sin importar que se pusiera.


Esme, mi esposa, no seas tonta, como no me va a gustar esta sorpresa, Dios Santo, solo tocame y te juro que te daras cuentas del efecto que causas en mi, jamás pienses que me desagrada lo que hagas o digas, o te vistas mientras seas tu, lo demás no importa—dije acariciando sus pomulos y reflejándome en sus ojos


Carlisle, yo… mmm… la verdad es que—vi como cerraba los ojos y suspiraba, respiro una, dos y a la tercera vez, abrió sus ojos nuevamente para mi, mostrando una seductora sonrisa—Bueno doctor, me gustaría mucho que me quitara estos dolores…-- se acerco a mi oído pegando su pecho a mi brazo y rozándolo provocando que saliera un siseo de mi boca--… que medicina cree que sea la adecuada, para estos males.


Se levanto poco a poco dejándome una vista preciosa ya que yo esta en cunclillas, me empeze a levantar despacio pasando mis dedos por sus piernas, rozando, acariciando, tentando.


Llegue al inicio de su traje de enfermera y comencé a pasar mis manos por encima de su disfraz, palpando la suavidad del cuero pero a la vez volviéndome loco con sus curvas, muchas veces me pregunte se había cometido un error al convertir a Esme en el pasado, pero por días como estos, días en los que todo el amor y la devoción que siento por ella calientan mi gélido cuerpo, Doy las gracias al egoísmo que sufri en ese momento y agradezco a Dios el que me permitiera conocerla y ponerla en mi camino para que fuera mi compañera.


Mis manos alcanzaron su cintura y la tome con fuerza pegándola a mi cuerpo—bueno Señorita vere que medicina podemos darle para aliviar estos…-- baje a besar su cuello y sentí como temblaba ante mi tacto, rei entre dientes--… insoportables dolores.


Empece a subir una de mis manos por su costado, palpando uno de sus pechos, agarrándolo con la mano y sobándolo—digame si se le quita el dolor – baje mi cabeza para besar el inicio de su escote, su cuello, escuche el gemido que solto Esme y me volvi loco.


Un gruñido de satisfacción salió de mi pecho, los chicos no lo sabían, porque nunca lo había demostrado en publico, pero en privado, nada mas mi dulce esposa conocía lo primitivo que podía ser, lo salvaje que alguien “civilizado” como yo puede llegar a estar y me encantaba, a ella le encantaba, ambos teníamos una vena hedonista y al igual que nuestros hijos nosotros también lo habíamos hecho en publico, pero ellos jamas lo sabrían.


Esme— gruñi, desesperado por su tacto—Si, Doctor—dijo con una sonrisa seductora—te necesito desnuda ahora—un gruñido feroz, de posesión, de pertenencia se me escapo dándole a entender que tan necesitado estaba de ella.


Esme rio y se empezó a bajar el cierre muy… pero muy despacio, malditos cierres, quería arrancarlo pero debía aguantarme esto era por ella no por mi, era para ella.


Sabes Carlisle, no se que tanto criticamos a Rosalie y a Emmett si tu y yo somos exactamente iguales—dijo terminando de quitarse el disfraz y quedando solo con el liguero, las medias y los tacones altos.


Querida los regañamos porque somos sus padres, y porque queremos lo mejor para ellos, pero aun así su salvajismo no se compara al nuestro, ellos es pasión puramente física Esme, nosotros es mas sentimiento que cuerpo—dije acercándome y dándome cuenta que ella caminaba hacia el ventanal de nuestro cuarto.


Querido…-- dijo deteniéndose y poniendo la mano en la ventana, volteo su mirada por sobre su hombro y encontró su mirada con la mia--… hay una fantasia que me gustaría mucho poder tener.


Ante esas palabras un escalofrio recorrió mi cuerpo.


ESME POV


No sabia que diría Carlisle cuando me viera con el disfraz de enfermera, pensé que no seria de su agrado, pero al final es un hombre y los hombres son visuales, que macho no disfruta de su mujer con un disfraz.


No crei que el plan de Rosalie funcionaria tan bien, pero solo bastaba con darme cuenta que las palabras que había dicho habían despertado mucho mas que su lujuria, habían despertado su curiosidad, esa vena hedonista que Carlisle se negaba aceptar, pero que tanto disfrutábamos.


Que fantasia Esme—pregunto el, no sabia como decirlo aunque eramos padres, también eramos personas con necesidades físicas y aunque nos gustaba dar el ejemplo a nuestros hijos, también teníamos nuestros secretos celosamente guardados, esta fantasia era una de ellas, no sabia como lo tomaria, así que lo dije de una sola vez.


Quiero que me hagas un striptease—ya esta lo dijo, respire, no podía creerlo, lo dije que bien. Me anime diciendo que Carlisle aun no había gritado así que no creo que fuera algo malo, cuando levante mis ojos y los centre en los suyos, vi el brillo de diversión de mi marido, me enoje; se estaba burlando de mi?, como se atrevía?


Carlisle, que se te hace tan gracioso hum?—estaba completamente cabreada, como podía reírse así de mi fantasía, yo siempre respetaba sus fantasías, por estúpidas que fueran.


Nada Esme, no es nada, es solo que… quieres que te baile? Enserio? – Olvidalo Carlisle sigamos con lo nuestro imagina que no te dije nada – me voltee estaba dolida, no era una mala fantasia yo solo quería…


Baila conmigo mi bella dama?—tomo una de mis manos y la beso, sonreí y me deje envolver por su abrazo caminamos al reproductor que Alice nos regalo hace un año y Carlisle busco una canción, se detuvo en una estación de radio que tenia una música lenta, sensual, sabia que la había escuchado antes pero no lograba recordarlo.


Carlisle regreso a mi lado y pego su cuerpo al mio, puso su palma en mi espalda baja y empezó a mover la cadera de forma excitante, pegando y restregando su erección a mi cuerpo, gemí, que delicia. Bajo su boca a uno de mis pezones, saboreo, lamio, mordió y lo atrapo, apretando el otro pezón entre su dedo índice y pulgar


Empece a mover la cadera de una lado a otro, girándola, pegándome a el, comencé a girar para quedar espalda-pecho y restregué mis pompis en su erección, un gruñido me hizo reir—así que buscaste lambada para excitarme eeh!!—dije riéndome.


Te gusta?—pregunto metiendo un dedo en mi centro y besando mi espalda—aah!! Si, claro que me gusta, en realidad me gusta mucho.


Decidi que un dedo no bastaba así que me movi mas lento pero restregando mas mi cuerpo, el entendió el mensaje porque la instante sentí otros dos dedos sumándose al primero, aunque claro si fuera virgen, ni siquiera tres dedos me relajarían para su embestida.


Con los tres dedos empezó a embestir y besar mi cuello, ese punto exacto en el que sabia era imposible resistirme, temblé se sentía delicioso tenerlo dentro, encorvo los dedos dando una forma de gancho, tocando mi punto G y explote, gemi y rasgue de un solo tiron su pantalón, termine en su mano así que no me sorprendió verlo introducir los dedos en su boca, saboreándome, como siempre lo hacia.


Carlisle empezó a llevarme al ventanal que estaba solo a unos paso y me separo las piernas y los brazos—Esme ya no aguanto tengo que entrar, necesito que te apoyes, estas lista querida?


Estoy empapada, hazlo amor—sentí como el empezaba a entrar, abriendo mis paredes internas, que delicia—hmmm!!—arquee la espalda y en cuanto lo hize, sentí como entro hasta el fondo, lo único que pude hacer fue gritar, una embestida, dos, tres, santo cielo ya no aguanto.


Carlisle yo… ya no aguanto—salió y embistió fuerte y hasta el fondo, no soporte, me vine, gemi hasta que crei que me quedaría sin voz, claro si eso fuera posible. Escuche el grito gutural de mi amor, esboze una sonrisa el siempre era así, primero yo, era yo la que tenia que disfrutar antes de que el gritara.


Nos empezamos a relajar y cuando por fin crei que estábamos saciados Carlisle me carga y me voltea y me lleva hasta la cama, quedo arriba empezó a besarme los parpados y cuando toco el turno de mis labios, fue un beso tierno lo que recibi.


Te amo Querido, gracias por esta fantasia—dije sonriendo para el.


Te amo Enfermera y de nada mi amor—me dio otro beso tierno y sonrio—por cierto Feliz Navidad.


Feliz Navidad Doctor—dije riendo



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